[vc_row type=”in_container” full_screen_row_position=”middle” column_margin=”default” scene_position=”center” text_color=”dark” text_align=”left” overlay_strength=”0.3″ shape_divider_position=”bottom” bg_image_animation=”none”][vc_column column_padding=”no-extra-padding” column_padding_position=”all” background_color_opacity=”1″ background_hover_color_opacity=”1″ column_link_target=”_self” column_shadow=”none” column_border_radius=”none” width=”1/1″ tablet_width_inherit=”default” tablet_text_alignment=”default” phone_text_alignment=”default” overlay_strength=”0.3″ column_border_width=”none” column_border_style=”solid” bg_image_animation=”none”][vc_column_text]La aspiración de fluidos se usa comúnmente para eliminar y recolectar líquidos. El dispositivo de aspiración típico consta de un recipiente de líquido, un tubo, una botella de recolección y una bomba de vacío.

A menudo, se coloca un filtro en el lado de entrada de la bomba para evitar que se succione líquido, mientras que un interruptor de pedal controla la alimentación de la bomba. El principio detrás de este proceso es simple: una bomba de vacío crea un diferencial de presión en la botella de recolección, lo que hace que el líquido fluya desde su fuente hacia la botella.

Las consideraciones para seleccionar la bomba óptima incluyen:

  • Funcionamiento sin aceite con excelente compatibilidad química
  • Caudal ajustable
  • Niveles de flujo y vacío adecuados para la aplicación

Contáctenos para discutir las bombas KNF y su aplicación única con uno de nuestros expertos técnicos.  [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]