Se conoce como hormigón armado a la técnica constructiva que emplea un refuerzo de barras o mallas de acero en el hormigón o concreto. Esta técnica también se conoce como concreto armado o reforzado. Comenzó a utilizarse en el siglo XIX. Es ideal en la construcción de edificios de todo tipo. También se utiliza para construir puentes, túneles y obras industriales. La mayor ventaja de la técnica es que las barras de acero resisten las tracciones y el hormigón las comprensiones.

El hormigón armado puede ser prefabricado o también se puede construir in situ. La elaboración in situ consiste en colocar los materiales al pie de obra; es decir, el lugar dónde se va a llevar a cabo la construcción. En cuanto al hormigón armado prefabricado se realiza en lugares especializados, son moldeados según la forma que se necesite en la obra.

Al momento de realizar el recubrimiento del hormigón armado (Espacio existente entre las barras de acero y la superficie interior del encofrado) el espacio debe ser mínimo, de aproximadamente 2 a 3 cm para vigas y columnas. En el caso de losas la distancia debe ser no mayor de 1,5 cm. Este procedimiento es importante para que los hierros nunca queden al descubierto, lo que garantiza su conservación. También protege al hierro del calor o en casos de incendios en la estructura.

La resistencia del hormigón armado

Generalmente en un período de 28 días después de fundido el concreto se podrá cuantificar su resistencia. Sin embargo, si se trata de una construcción en particular como túneles o presas el período de tiempo puede ser menor o mayor. En el caso de los túneles puede ser de 7 días, no obstante en las presas puede durar 56 días e incluso más.

Esta resistencia se suele determinar en muestras cilíndricas de 15 cm de diámetro y 30 cm de altura. En cuanto a los hormigones normales (De 200 a 300 kg aproximadamente) y de mediana resistencia (350 kg a 400 kg) va a estar condicionada directamente por la relación agua/cemento. Lo que quiere decir que a menor relación tendrá mucha más resistencia.

¿Por qué utilizar hormigón armado?

  • Los materiales que lo componen son muy fáciles de adquirir, lo que le permite posicionarse como una técnica aceptada universalmente
  • Alto grado de durabilidad
  • Poco mantenimiento
  • Es ideal si se desea conseguir distintas formas arquitectónicas
  • Resistencia al fuego por aproximadamente 3 horas
  • Puede lograr diafragmas de rigidez horizontal

Para conocer los equipos que pueden servirle en la construcción con hormigón armado le invitamos a visitar el artículo: Ensayos No Destructivos De Hormigón: Guía De Equipamiento